Detrás de su mirada (Parte 1)

Idea existente pero no presente,

corazón cercano pero muy lejano.

Sabes mirar, 

pero no observar.

Observo cada mirada,

quisiera sentirla cada mañana.

Ojos profundos con secretos,

nada que un corazón no haya cubierto.

Te leo, te pienso y te sueño,

sin embargo no te tengo.

¿Qué hay detrás?, 

¿Cómo lograr entrar?

Corazón grande y humilde,

con miedo pero fuerte.

Adversidades confrontas,

dificultades derrotas.

Pero, ¿Es cierto lo que mis ojos perciben?,

cómo saber que lo se.

Cómo conocer si es real,

solo existe un muro en verdad.

Derríbalo, destrozalo, 

demuestra lo hermoso de la realidad tangible.

Rompe con la fantasía,

abre paso a la realidad.

El corazón siente y la razón permanece,

será que un día tú... estés presente...?

El rugido del leopardo (Parte 1)

Selva grande y húmeda, 

que cuando hablas se escucha el sonido del natural silencio, majestuosa y misteriosa. 

Tus secretos son inexplicables, el vivir en ti es difícil, 

el dormir resulta incierto. 

Dentro de ti habitan diferentes criaturas,

feroces, calmadas y misteriosas.

He ahí detrás de ese gran árbol, majestuoso y frondoso,

raíces fuertes y gruesas, ¿Qué hay detrás?.

¡Leopardo!, sereno y bello, majestuoso e incierto,

mirada penetrante que incita al peligro,

Ojos verdes, brillosos, hermosos e incitantes al peligro,

pelaje frondoso y suave, 

perfectamente alineado a la brisa del aire que corre sobe su piel.

¿Qué escondes?, ¿Qué buscas, detrás de ese árbol?.

No temas, no estas en peligro,

si, es la majestuosa selva tu hogar.

Pero, tú, criatura majestuosa, fuerte y capaz,

no temas pues tu fuerza y belleza puede contra todo lo demás.

Camina, trota, ¡CORRE! que la selva es tuya,

hermosa fortaleza, descubrela enfrentando lo desconocido.

Es tan magnifica tu presencia,

que todos te miramos con decencia.

¡Haz salido! Conoces el camino, acércate,

siente mi presencia, mírame.

En tus ojos veo el miedo, en tus movimientos la duda,

en tu esencia reconozco tu fortaleza y hermosura.

¡GRRR! Te oigo rugir, te escucho reclamar,

te he sentido al intentar comunicar.

A pesar del miedo, defiendes con tu poder,

pensaba que había duda, ¡HA! por favor...

Precaución, precaución para entrar y caminar,

terrenos conocidos pero diferentes.

Nada que no puedas enfrentar,

tus terrenos, solo tú los has de ocupar.